Autor: Rodrigo Oly Delgado
Las plagas son destructoras silenciosas que pueden acabar con cultivos de diferentes productos alimenticios. Esos insectos, que pueden parecer insignificantes, son uno de los principales problemas con los que lidian los agricultores. Sin embargo, hay otros insectos, depredadores y parasitoides, investigados y promovidos por el CIAT, que se convierten en enemigos naturales de las plagas y ayudan a proteger la producción.
El gusano cogollero (Spodoptera frugiperda) es un insecto que puede llegar a medir hasta tres centímetros de largo. Es de color canela claro. Su cabeza tiene forma de Y invertida y se diferencia así de otras especies de gusanos. Es una de las principales plagas con la que los productores lidian día a día.
Es una plaga polífaga, es decir, que tiene excesivo deseo de comer. Provoca pérdidas severas en los cultivos de maíz, soya y sorgo en los cultivos de Santa Cruz.
El responsable del Proyecto Maíz del Centro de Investigación Agrícola Tropical (CIAT), Edgar Orquera, explica que el ataque del gusano cogollero al maíz inicia desde la plantación del cultivo.
“El gusano cogollero es una larva que ataca desde el momento en que hacemos la siembra. Si no realizamos un tratamiento o una buena preparación de suelo, tenemos un ataque del cogollero que empieza a cortar la planta cuando está en estado evolutivo”, señala.
https://youtu.be/KhA-mDU2oxI
Orquera menciona que esta plaga puede llegar a afectar hasta un 80% del cultivo de maíz. “Si no hacemos el control preventivo y, en algunos casos, el curativo, baja la producción por hectárea, afectándose hasta un 40, 60 e incluso 80% del rendimiento”, dice Orquera.
El responsable expresa que el control debe ser constante debido a que esta plaga se presenta todo el año. “El cogollero está todo el año. Disminuye su ataque en temporada de invierno, por las condiciones de temperatura, pero sigue ahí, listo para atacar”, manifiesta.
El gusano cogollero es una de las plagas principales que afectan de manera drástica a los cultivos. No obstante, hay otras plagas de igual letalidad que el cogollero. Una de ellas es el chinche verde pequeño (Piezodorus guildinii). Este insecto de seis patas y dos antenas tiene como víctima principal a los cultivos de soya y es el causante de poner en apuros a los productores.
“Los chinches verdes pequeños constituyen una de las principales plagas de los cultivos, es por eso que debemos hacer monitoreos constantes. Hay veces que se presentan en baja escala, sin daño significativo, pero hay otras ocasiones en que sí se debe realizar aplicaciones químicas para cortar o controlar su ciclo”, indica el encargado del Proyecto Soya en el CIAT, Ronald Saavedra.
Saavedra afirma que un insecto como el chinche verde pequeño, en cuestión de días, puede llegar a destrozar más de 10 hectáreas de plantación de soya. “Si existe una presión alta, entre 3 a 5 días puede acabar con 10 o 15 hectáreas, porque es una plaga bastante agresiva”, declara el agrónomo especializado en soya.
A continuación, te presentamos la entrevista a Ronald Saavedra. Escúchalo.
El manejo de los agentes químicos no es favorable para la salud humana. El CIAT, con el objetivo de controlar estas y otras plagas de manera natural, lidera un proyecto que aporta al control eficiente de los insectos que son perjudiciales a los cultivos estratégicos para el departamento y el país.
El laboratorio que investiga este tema es el de Entomología (o estudio de los insectos), que forma parte del área de Manejo Integral de Cultivos y Biotecnología (MIC) de la misma institución.
“Desde el área de entomología, diseñamos, ejecutamos y gestionamos un proyecto de investigación para la búsqueda, identificación y relación de enemigos naturales frente a plagas en cultivos de importancia económica”, explica Gabriela Rivadeneira, encargada del MIC.
https://youtu.be/iGgWWIkbKtM
El proyecto para controlar a los insectos que son perjudiciales a los cultivos ha implicado realizar estudios a otros insectos, depredadores y parasitoides, que son enemigos naturales del gusano cogollero y de los chinches verdes pequeños.
“Hemos realizado diferentes estudios, en la zona norte, este y en los valles cruceños, donde existen las plagas de cultivos de soya, trigo y maíz. Se encontró enemigos naturales, que son insectos depredadores que se alimentan de las plagas. Sin embargo, también se encontró parasitoides, que son los que ponen sus larvas sobre o dentro de la plaga”, precisa Paulina Jaldín, encargada del área de Entomología en el CIAT.
Ingresa al siguiente link para escuchar la entrevista a Paulina Jaldín.
Revisa la siguiente galería de fotos de insectos que se convierten en plagas de cultivos, así como de otros insectos que, más bien, favorecen la lucha contra las plagas.
Uno de los parasitoides más importantes para la lucha contra el gusano cogollero es una microavispa registrada científicamente como Eiphosoma laphygmae . “Hemos encontrado potencialidad antiplaga en la Eiphosoma laphygmae, por ser una especie parasitoide. También encontramos a Chelonus insularis, que afecta con sus larvas al gusano cogollero”, explica Ayax Del Valle, coordinador en el área de Entomología.
Uno de los objetivos principales del proyecto es eliminar el uso de los plaguicidas e insecticidas o reducirlos a su mínima expresión, a cambio de la utilización de enemigos naturales. Por ejemplo, en vez de usar un insecticida ante el ataque del gusano cogollero, se recomienda implementar el uso de la microavispa Eiphosoma laphygmae.
En la actualidad, se realiza la venta de la avispita Trichogramma, enemiga natural que protege a las plantaciones de la caña de azúcar. Este minúsculo ser viviente ataca a la plaga del barrenador de tallo (Diatraea saccharalis). “Hay enemigos naturales que se crían en laboratorio, tal es el caso de los Trichogrammas, que son insectos que atacan a la plaga de los barrenadores”, menciona Paulina Jaldín.
Si bien controlar a las plagas con los enemigos naturales es la principal causa de este proyecto, existe también un beneficio económico para los agricultores. “Por ejemplo, hablando de la avispa Trichogramma, las liberaciones cuestan 49 Bs, hablando de una hectárea. Los productos agroquímicos son caros, alrededor de 100 a 200 Bs para aplicar en una hectárea”, dice.
https://youtu.be/2d28_jrk2cI
La utilización de insectos para luchar contra las plagas es un caso de éxito de investigación científica. “Hemos logrado encontrar más de 50 especies de enemigos naturales, junto con otras 88 especies de plagas en total. Ha sido un logro porque hemos observado la distribución de estas especies y hemos identificado cuáles son las más problemáticas y cuáles son sus enemigos naturales. Estamos empezando la segunda fase del proyecto”, indica Ayax Del Valle.