REPORTAJE
Por: Roger Manuel Ramos
Eran las cuatro y media de la tarde cuando el Español Álex Gallego se encontraba corriendo como parte de su rutina de entrenamiento para competir en una maratón de Zaragoza, de pronto vio escuchó gritos de auxilio, inmediatamente se aproximó y encontró al lado de una piscina una niña de un año y medio con síntomas de ahogamiento. Eran minutos cruciales, por ello ya mismo inició las maniobras de reanimación mientras se aseguraba de que se había avisado a los servicios de emergencias. La acción oportuna del enfermero fue clave para mantener los signos vitales de la menor hasta el arribo de la ambulancia y posteriormente del helicóptero que la trasladaría de urgencia a un hospital en Zaragoza, dónde se recuperó favorablemente. Este episodio sucedió a inicios de marzo del presente año y tuvo un final feliz gracias a los conocimientos e intervención oportuna de Álex Gallego.
Una situación diferente ocurrió en Puente San Pablo, localidad limítrofe entre Santa Cruz y el Beni, allí un grupo de estudiantes se fueron de aventura al río San Pablo, Ruth Rocha no sabía nadar, en el intento por aprender se terminó ahogando. Sus compañeras lograron arrastrarla a la orilla del caudaloso río, sin embargo, nadie pudo practicarle los primeros auxilios de reanimación a la estudiante que presentaba todavía signos vitales, finalmente llegó personal de salud, pero no pudieron salvarla, había transcurrido demasiado tiempo.
En Bolivia las capacitaciones sobre primeros auxilios son escasas, no forma parte de la malla curricular del sistema educativo. En ningún nivel de educación se promueven dichas capacitaciones o al menos no las visibiliza, son instituciones privadas u organizaciones sin fines de lucro como la Cruz Roja que llevan adelante actividades de adiestramiento en primeros auxilios, de la misma forma, JICA agencia de cooperación internacional de Japón, bomberos voluntarios y esporádicamente la policía boliviana a solicitud de autoridades educativas.
Bolivia carece de investigaciones sobre primeros auxilios
La reanimación cardiopulmonar puede llegar a salvar vidas, en circunstancias en que una persona ha dejado de respirar o el corazón ha dejado de palpitar. Esto puede suceder después de una descarga eléctrica, ataque cardíaco o ahogamiento.
El médico general Ever Paucara asegura que un paciente con paro cardiorrespiratorio tiene hasta media hora aproximadamente para ser salvado en un hospital, y cualquier persona capacitada puede iniciar la reanimación cardiopulmonar (RCP) y puede llegar a salvarle la vida hasta que llegue la ambulancia. Para ello es necesario mantener los signos vitales, que son las señales o reacciones que revela las funciones básicas del organismo a partir de la frecuencia cardiaca, pulso, presión arterial, frecuencia respiratoria y la temperatura.
No hay datos estadísticos de los casos que se presentan con mayor frecuencia en los hospitales bolivianos derivados de episodios provocados por paro cardiaco, atragantamiento, o ataque epiléptico.
En Bolivia tampoco se conocen investigaciones sobre primeros auxilios y su importancia. La investigación “Efectividad de Intervenciones Educativas en Primeros Auxilios” realizada por Daniela Tenorio para la universidad Tecnológica de ciudad Pereira en Colombia y publicado por la fundación universitaria del área andina, demostró que la intervención educativa a partir del apoyo de los docentes y los directivos académicos dio resultados exitosos. Se evidenció que las niñas incrementaron los conocimientos, las acciones y destrezas para la práctica de primeros auxilios. La investigadora sostiene que “la evidencia científica ha demostrado que la enseñanza de una adecuada práctica de Primeros Auxilios en la comunidad, contribuye con el cambio en la estructura de mortalidad”.
https://youtu.be/u6FhfrO2P0U
Procedimientos efectivos para la práctica de la reanimación cardiopulmonar
La médico Aurora Rojas asegura que el RCP es un procedimiento de emergencia para salvar vidas, y se practica cuando una persona deja de respirar y el corazón deja de palpitar, esto sucede generalmente cuándo una persona se ahoga, sufre un ataque cardiaco, o recibe una descarga eléctrica.
Esta doctora asegura también que cualquier persona puede realizar la reanimación cardiopulmonar siempre y cuando haya hecho un curso de capacitación anteriormente, sin necesidad de ser médico o paramédico.
En Estados Unidos, según la Asociación Americana del Corazón (American Heart Association), aproximadamente 475,000 estadounidenses sufren ataques cardíacos, el 90 por ciento de los que no llegan al hospital mueren. La tasa de supervivencia hubiera aumentado si esos pacientes hubieran recibido RCP. Desafortunadamente, muchas personas carecen de entrenamiento y conocimientos en este tipo de reanimación.
Acción oportuna salvó la vida de una niña
El enfermero Alex Gallego pudo salvar la vida en marzo de la niña de año y medio gracias a su formación profesional. El considera vital que todas las personas deberían tener una noción básica de primeros auxilios y enseñarse en los colegios, “porque permitirá estar preparado para actuar si, por ejemplo, en algún momento tu hermano se atraganta o presencias una parada cardiorrespiratoria de camino a la escuela”, apunta
Recuerda con claridad el suceso que le tocó vivir hace pocos meses, la bebé se encontraba pálida y fría y presentaba un cuadro de paro cardiorrespiratorio así que inició inmediatamente las maniobras de reanimación y se aseguró de que se había dado parte a los servicios de emergencia. “Estuve realizando compresiones seguidas de insuflaciones tras las cuales ponía a la bebé de lado para que expulsara el agua que había tragado, fueron apenas 10 minutos que se hicieron eternos hasta que llegó la ambulancia”. Cuando llegó la ambulancia con la ayuda de sus colegas lograron estabilizarla a la bebé. Posteriormente llegó el helicóptero que trasladó a la niña al hospital donde 10 días después abandonaría con su salud estable.
Algunos profesores del nivel primario y secundario de Santa Cruz, Tarija y Beni aseguran que no existen capacitaciones sobre primeros auxilios en Bolivia. No son parte de la malla curricular. Tampoco las alcaldías y gobernaciones promueven capacitaciones. Pedro Noe, es maestro de secundaria en la localidad de Puente San Pablo, Beni, lugar donde ocurrió esa muerte por ahogamiento por falta de primeros auxilios, asegura que es fundamental que los estudiantes adquieran los conocimientos básicos y es necesario que forme parte de la malla curricular del sistema educativo boliviano.
Esta misma opinión tiene Cristina Singuri, docente de secundaria en Tarija que sugiere que las autoridades de los diferentes niveles de gobierno deben establecer capacitaciones periódicas para fomentar en los estudiantes el aprendizaje esencial sobre primeros auxilios. Josué Ramos, profesor de primaria en el municipio de Cotoca también ve “necesario y de suma importancia”, introducir las capacitaciones sobre primeros auxilios en el sistema educativo para que sea permanente.
Los atragantamientos en Bolivia son otras de las causas que ocasionan un paro cardiorrespiratorio y pueden desembocar en muerte si los primeros auxilios no se aplican inmediatamente. Un caso de atragantamiento ocurrió en Cochabamba a finales del 2019, un niño de dos años murió atragantado tras que su padre lo dejara comiendo solo. El infante estaba en su silla sirviéndose un pedazo de pollo y un trozo de huevo, mientras su padre bañaba a su otra hija de cuatro años. El pequeño, al encontrarse solo, no pudo ser socorrido.
Según información de la página web especializada en salud medineplus.com, portal de la la biblioteca nacional de medicina de los Estados Unidos, las causas principales del atragantamiento son alimentos u objetos pequeños que quedan atrapados en la garganta y obstruyen las vías respiratorias y causan asfixia, provocando que el oxígeno no llegue a los pulmones y al cerebro. Si este último permanece sin oxígeno durante más de cuatro minutos, puede ocurrir algún daño cerebral o la muerte.
La médico Aurora Rojas señala que los niños pequeños son los que están expuestos a mayor riesgo y las causas más frecuentes de asfixia en Bolivia son por monedas y dulces, en menor porcentaje por consumo de salchichas, uvas y objetos pequeños.
Cuando alguien se esté asfixiando, una acción rápida puede salvarle la vida, desde dar golpes en la espalda, realizar la maniobra de Heimlich y poner en acción la reanimación cardiopulmonar remarcó la médico Rojas.
El aprendizaje de primeros auxilios resulta vital para evitar que se repitan en Bolivia sucesos trágicos por la falta de entrenamiento y capacitación.